ICL Iberia sigue con el progresivo incremento de aprovechamiento de sal de sus depósitos salinos. Esta semana, se ha producido la primera venta de sal proveniente en su 100% del depósito de la Botjosa de acuerdo con el Plan de Restauración en curso.
Se trata de una carga de 4 mil toneladas de sal purificada que esta semana se cargará en un barco en la terminal portuaria de la compañía en el Port de Barcelona y que en los próximos días se enviará a Holanda con el fin de ser utilizada por el deshielo de las carreteras. Se trata de sal purificada muy fina que se ha tratado ad hoc en la planta de Sallent y que se adecua al estándar del norte de Europa.
Con la voluntad de apostar por la economía circular, lCL sigue buscando nuevos mercados para ir incrementando la comercialización de sal extraída de sus depósitos. Cabe destacar que la empresa ha ampliado su equipo de ventas de sal con el objetivo de potenciar la comercialización de este producto con nuevos mercados y clientes. En los últimos meses la compañía ya ha comercializado una parte de la sal proveniente de la Botjosa, inicialmente, a través de su mezcla con sal proveniente de su instalación en Súria y ahora, por primera vez, lo hace a través de una venta de sal proveniente el 100% de la Botjosa.
El inicio de la comercialización de sal proveniente de los depósitos salinos de Sallent ya tuvo lugar durante el año 2020 después de varias pruebas y una vez obtenidos los correspondientes permisos. Tras esta fase, lCL ha acelerado la extracción de la sal del depósito de la Botjosa a lo largo de este año, hasta extraer y retirar más de 200.000 toneladas.
ICL Iberia y la Fundación Convento de Santa Clara de Manresa han renovado un año más el convenio de colaboración del proyecto solidario “el taller-cosidor”, dirigido a mujeres de la comarca del Bages que viven una situación de riesgo de exclusión social. Una representación de la empresa y con la presencia de su consejero delegado, Patricio Chacana, han realizado una visita al taller-cosidor y han sido recibidos por Sor Lucia Caram y las mujeres usuarias. La colaboración se lleva a cabo desde el 2019.
El proyecto está orientado a fomentar un espacio de relación, aprendizaje de la lengua, habilidades manuales, integración en las costumbres del país, hábitos y valores que beneficia mayoritariamente a mujeres recién llegadas y/o con riesgo de exclusión social. El equipo que gestiona el proyecto está formado por voluntarias que trabajan con las mujeres, más de una treintena, creando un sitio de aprendizaje entre culturas diferentes. Las mujeres beneficiarias, con hijos pequeños, se reúnen cada día en el espacio, mientras que otras personas voluntarias realizan actividades con sus hijos en los mismos horarios (en una especie de ludoteca). Las mujeres usuarias tienen una edad de entre 28 y 55 años. La mayoría de ellas también provienen del servicio del Banc dels Aliments, de la misma fundación.
Las mujeres que se benefician de la iniciativa aprenden a coser y reciclar todo tipo de ropa de vestir para obtener recursos y herramientas que puedan servirles para insertarse en el mercado laboral ordinario. En el costurero se encargan de coser unas etiquetas de prevención en la ropa y mochilas de los mineros.
Durante el encuentro también se han explorado nuevas vías de colaboración entre la empresa minera, como la formación e inserción laboral de jóvenes con riesgo de exclusión social y otras iniciativas que se llevan a cabo desde la Fundació Convent de Santa Clara.
ICL Iberia y UManresa – Fundación Universitaria del Bages han renovado y ampliado el acuerdo de colaboración a través del cual la empresa minera apoya las acciones de promoción de las vocaciones científicas en las primeras edades que se llevan a cabo desde el Lab 0-6 de la Universidad. El nuevo convenio da continuidad al apoyo que ICL Iberia ha dado a UManresa desde el año 2016. Aparte de ampliar la dotación económica que la empresa minera aporta a las diferentes actividades, este nuevo convenio permite avanzar en la internacionalización del proyecto de UManresa, un aspecto que ya ha empezado a estudiarse. Además, ICL Iberia también forma parte del comité asesor del Lab con la aportación de conocimiento.
Con su aportación, ICL quiere contribuir a impulsar el aprendizaje, la investigación y la documentación en torno a la educación científica. En este sentido, ICL Iberia promueve que niños de las escuelas de su ámbito de influencia, concretamente de Súria, Sallent, Callús, Balsareny y Santpedor visiten el Lab 0-6 y puedan participar en las actividades que se proponen. También se organizan actividades de divulgación científica en estos municipios y la empresa minera apoya el premio La Ciencia y los Niños, un galardón que reconoce propuestas elaboradas por docentes para promover el espíritu científico de los niños en las aulas de la etapa educativa infantil.
El nuevo convenio aborda, por primera vez, la posible internacionalización de la actividad del Lab 0_6, dándola a conocer en los países en los que la empresa tiene implantación.
Más Lab y más ciencia en las primeras edades
La renovación y ampliación del compromiso de ICL con UManresa coincide en el tiempo con el estreno del nuevo edificio FUB4-UEducació, una construcción que aglutina y concentra todos los estudios y servicios de educación de la institución universitaria.
La construcción del nuevo edificio ha permitido ampliar los espacios dedicados a la promoción de la educación científica en las primeras edades que, hasta ahora, se dirigían al público de 0 a 6 años.
En el nuevo edificio, las propuestas se han podido ampliar y especializar en función de las edades de los niños. Así, en la Upetita, la nueva guardería de la Universidad, se ha creado el espacio Explora 0_3, pensado y concebido para la primera etapa educativa. En la primera planta del edificio se pueden encontrar los espacios 3_6 y 6_8, que hacen que las propuestas se alarguen hasta la segunda etapa del ciclo infantil (3 a 6 años) y la primera de la educación primaria ( 6 a 8 años).
ICL Iberia ha publicado la octava edición de la Memoria de Sostenibilidad. Se trata de un extenso documento de 94 páginas que recoge los indicadores de la empresa relativos al ejercicio 2021. Con esta publicación ICL cumple de nuevo con su compromiso de transparencia y responsabilidad social.
Entre los datos que aparecen, destaca la venta de 615.219 toneladas de potasa (cuyo 74% se exportó y el 99% se destinó a la actividad agrícola como fertilizante) y la comercialización de 1.135.261 toneladas de sal (cuyo 46,5% se destinó al deshielo de carreteras y el resto a la industria electroquímica). La memoria también refleja la inversión que la empresa realizó el pasado año de 61 millones de euros con una cifra de negocio de 242 millones de euros.
Entre los hechos relevantes de 2021 está la inauguración de la rampa de Cabanasses, que conecta la mina con la planta de tratamiento de Súria con una cinta transportadora y que supone un gran paso hacia una minería más sostenible, mejorando la seguridad y el eficiencia de la actividad y al mismo tiempo reduciendo su impacto ambiental (su huella de carbono), entre otros eliminando la circulación de camiones de transporte de mineral que hasta ahora pasaban por el centro urbano de Súria. También se ha construido una nueva planta de tratamiento de sal de deshielo y la renovación de las instalaciones de carga de trenes y camiones, así como la consolidación de la nueva terminal de la compañía en el Port de Barcelona.
Durante el 2021 la inversión ambiental de la compañía fue de 10,4 millones de euros y se logró la reducción de 4,78% de producción de residuos respecto a 2020. En este mismo sentido, el 100% de la electricidad utilizada por la empresa procede de fuentes renovables. ICL Iberia ha sido galardonada en 2021 con la categoría EsAgua Gold por la implicación y el compromiso con la gestión de los recursos hídricos en la actividad. La categoría Gold es un reconocimiento a las organizaciones que, además de calcular la huella hídrica y de agua de forma verificada, han implementado un plan de medidas de reducción de la huella.
También destacan las más de 11.000 horas de formación en prevención de riesgos laborales entre la plantilla con más de 1.700 participantes.
ICL refuerza su compromiso con la sostenibilidad y la transparencia y se compromete a seguir trabajando para seguir integrando en la estrategia global de la compañía los conceptos de medio ambiente, sociedad y gobernanza.
La Asociación Internacional de Fertilizantes (IFA) ha otorgado a ICL Iberia su Green Leaf Award 2022 como reconocimiento a la implantación de un nuevo sistema de gestión que ha mejorado la salud, seguridad y emisiones de su actividad. Este prestigioso galardón, que se entrega de forma bianual, reconoce el rendimiento destacado en seguridad, salud y medio ambiente (SHE) en la producción de fertilizantes por parte de los miembros del IFA.
ICL Iberia ha sido seleccionada, de entre 25 proyectos presentados en la categoría de productores de fosfatos/potasa, por su estudio ambiental sobre las acciones realizadas para reducir las emisiones de efecto invernadero en su planta de Súria y su gestión global de seguridad, salud y medio ambiente. La Asociación Internacional de Fertilizantes, fundada en 1927, es la única asociación mundial de fertilizantes, con unos 400 miembros en 70 países. Tiene la misión para promover la producción, distribución y uso eficiente y responsable de los nutrientes de las plantas.
Los expertos independientes que evaluaron el proyecto de ICL Iberia afirmaron que "la aplicación desde el sitio de producción de ICL Iberia demuestra de una manera impresionante cómo gestionar una minería responsable de fertilizantes; este esfuerzo se va reflejar también en los resultados positivos de sus indicadores clave de rendimiento”.
El premio lo han recogido Lluís Fàbrega y Roman Tejero, del departamento de Sostenibilidad y Medio Ambiente de ICL Iberia, durante la Reunión General de la IFA que se ha celebrado en Viena. Fàbrega, responsable de Sostenibilidad y Medio Ambiente de ICL Iberia, ha explicado que este galardón "es un reconocimiento al esfuerzo que se está haciendo desde la compañía y que nos confirma que estamos yendo por el buen camino". Y que alcanzar la minería sostenible es un paso ambicioso y posible hacia el que debemos seguir caminando”.
ICL Iberia ha inaugurado las obras de urbanización del arroyo del Tordell. Lo ha hecho con una jornada popular en la que ha invitado a los vecinos y vecinas de Súria para que descubrieran y disfrutaran del nuevo espacio. Durante la mañana se han organizado diferentes actividades pensadas para todas las edades. El consejero delegado de la empresa, Patricio Chacana; y el alcalde de Súria, Albert Coberó, han destacado la mejora del espacio y los beneficios que este proyecto urbanístico conlleva a la población.
Más de 300 personas han participado en la jornada inaugural del nuevo arroyo del Tordell. Los trabajos han consistido en tareas de movimientos de tierras (se han movilizado más de 40.000 m3), la escollera de protección en el rieral, la creación de la mota o el paseo fluvial, el sistema de drenaje y los principales elementos de urbanización (aceras y explanadas). También se ha instalado el nuevo sistema de iluminación, que incluye nuevos báculos y luminarias de tecnología LED, la instalación del mobiliario urbano como bancos, barandillas, papeleras y señalización; y la restauración ambiental de los diferentes espacios del rieral con la plantación de especies de árboles y plantas autóctonas que ha contado con la colaboración de los escolares de Súria.
El acto de inauguración se ha iniciado con unos parlamentos del alcalde de Súria, Albert Corberó; y el consejero delegado de ICL Iberia, Patricio Chacana, que han explicado el proyecto de urbanización ejecutado. Seguidamente, se ha descubierto una placa conmemorativa y se han iniciado las diferentes actividades. Ha habido juegos del Lab_0-6 para niños, talleres de reciclaje, de prevención, así como la presentación y lectura del libro solidario “Nuestros Súperhéroes” editado por ICL. También se ha adecuado un espacio con césped artificial para poder jugar un rato a fútbol y baloncesto. La empresa también ha realizado una jornada de puertas abiertas dirigida a surienses y trabajadores de ICL Iberia para visitar el mirador de la planta. Durante todo el acto en el rieral del Tordell ha habido la actuación musical del grupo local Spin-off.
Las fases del plan de mejora
La urbanización forma parte de las obras de mejora urbanística, paisajística y ambiental que ICL Iberia está llevando a cabo en la entrada principal del municipio. El proyecto, con una inversión de 4 millones de euros, contempla distintas fases. Hasta ahora ya ha finalizado el nuevo sistema de semáforos en el barrio del Fusteret, y la rotonda de entrada a Súria. A partir de ahora se trabajará con la tercera y cuarta fase, que contarán con la urbanización y tratamiento paisajístico del camino peatonal que va desde la entrada de ICL hasta el barrio del Fusteret con la mejora ambiental del camino y el talud , realizando una actuación de integración unitaria. La quinta y última fase de la actuación permitirá la integración del margen de la riera convirtiéndose en una transición natural entre las instalaciones de ICL y la zona del Rieral del Tordell.
ICL Iberia sigue con su plan de impulso de la minería sostenible con la puesta en servicio de una nueva planta de tratamiento de la sal de deshielo en sus instalaciones de Súria.
Esta nueva planta ha supuesto una inversión de cerca de 3 millones de euros y permitirá duplicar la capacidad de producción de sal de deshielo de ICL. Con este empuje, la compañía prevé llegar a final de año a una producción de sal de deshielo de unas 900 mil toneladas, incluyendo parte de material extraído del proceso de restauración de la Botjosa, lo que supone un ejercicio de economía circular iniciado ya con la planta de Sal Vacuum. Esta sal irá destinada al mercado nacional, europeo y de Estados Unidos principalmente.
La instalación de la nueva planta, diseñada con un doble sistema de alimentación, le permite, pues, tratar sal de roca tanto de mina como material salino extraído de los depósitos salinos, como el de la Botjosa.
Una vez estrenada, se espera un crecimiento significativo del tratamiento de sal de deshielo, incluyendo también un mayor incremento del ritmo de restauración de la Botjosa, por lo que, ICL ha puesto en marcha en las últimas semanas una nueva maquinaria de mayor capacidad en el antiguo depósito de la Botjosa, para intensificar los trabajos de retirada y poder así alimentar con material proveniente de este depósito la nueva planta.
De esta forma, se cierra el ciclo con la recuperación del componente salino para su reintroducción en el mercado.
La nueva planta estará al 100% operativa en las próximas semanas, una vez concluya la actual fase de pruebas. Está operada por la empresa ARIPLAN.