ICL Iberia trabaja en productos especializados en el ámbito de los fertilizantes y también de la industria electroquímica desde la base de los hasta ahora 2 productos principales: la sal y la potasa, que se extraen del interior de las galerías mineras de la Cuenca Potásica Catalana.
El camino hacia la minería sostenible bajo criterios de economía circular impulsa al mismo tiempo la investigación de nuevos usos de productos de la minería que hasta ahora no se comercializaban. Es el caso del sulfato cálcico precipitado o del carbonato cálcico precipitado, que se lanzarán al mercado gracias a los estudios realizados dentro del área de I + D o también la sal purificada para mercados exigentes de deshielo.
SAL VACUUM
La sal vacuum está considerada de máxima pureza (con el 99’97% de cloruro sódico), sal con un valor añadido para la industria electroquímica además de ser también necesaria para la adaptación al cambio normativo aplicado a finales de 2017, por el que la electrólisis del cloruro sódico deja de hacerse por el sistema de celdas de amalgama de mercurio y se prioriza el sistema de celdas de membrana.
Con la puesta en funcionamiento de la nueva planta de cristalización en las instalaciones de ICL Iberia en Súria, la capacidad anual de producción de comercialización anual es de 750.000 toneladas (600.ooo de sal vacuum y 150.000 de sal de alimentación), y más 25.000 toneladas de potasa blanca.
La sal vacuum también permite a otras industrias mejorar sus procesos así como ofrecer productos de mayor calidad, como es el caso de la industria de tratamiento de aguas y de la alimentación tanto humana como animal.
La sal tiene muchas aplicaciones y usos diferentes: industria farmacéutica, potabilización de aguas, industria del papel, fluidificante en aleaciones, disolventes, plásticos, perfumería, jabones, detergentes, insecticidas y fungicidas, complemento en la industria petrolífera, y conservantes , entre otros.
POTASA BLANCA
La planta de cristalización no sólo produce sal vacuum de altísima calidad, sino que también produce potasa blanca, concretamente 25.000 toneladas al año. La potasa blanca tiene varias aplicaciones: para la industria de los fertilizantes, industria química y la industria alimentaria.
La potasa blanca es KCl (cloruro de potasio) sin presencia de óxido de hierro, el cual le da la tonalidad rojiza a la que estamos acostumbrados. En el caso de la potasa obtenida por cristalización, su tonalidad es blanca como el Cloruro de Sodio. Su pureza también incrementa gracias a su proceso de obtención, siendo un producto catalogado de Alta Pureza en KCl (99,5%).
La potasa blanca, es un producto de alta pureza que se obtiene por enfriamiento repentino de sal.